Como cristianos y bautizados, estamos viviendo en estos días, con mucha alegría, fe y esperanza, esta experiencia tan especial de ser bendecidos con la visita del corazón de San Roque González, que está recorriendo nuestra provincia. El corazón de Roque González ha quedado intacto después de su martirio y se lo conserva en la catedral en Asunción (Paraguay). Este recorrido del corazón del Roque nos invita a reflexionar sobre la importancia de seguir las huellas de los santos en nuestra vida cristiana y la influencia de las reliquias en nuestra vida de fe.
La palabra reliquia viene de restos; la reliquia de los Santos son los restos del cuerpo o de una vestimenta de quien fuera un “Santo”; es decir, de alguien que vivió con dedicación y entrega el mensaje del Evangelio y se jugó la vida de manera heroica, por el Señor. La Iglesia lo reconoce como ejemplo para seguir a Cristo en la vida cristiana. La veneración de los santos y las reliquias es una antiquísima tradición de la Iglesia como camino para profundizar nuestra fe en Cristo. En muchos casos las reliquias son medios de grandes milagros por parte de Dios.
El paso del corazón del Roque González es una invitación para que por la intercesión del santo fundador de nuestros pueblos, realmente seamos bendecidos por Dios. El primer mensaje que nos da esta experiencia es una invitación a la conversión y a la santidad, vocación a la que todos estamos llamados. Nos dice el mismo apóstol Pedro: “Vivir de una manera completamente santa, porque Dios, que los llamó es santo, pues la escritura dice: Sean ustedes santos, porque yo soy santo” (1 Pedro 1, 15-16). Quiera Dios que este paso del corazón de Roque González sea una invitación para todos nosotros a buscar la santidad, amando profundamente la vida y entregando esta vida para la misión de Dios hasta las últimas consecuencias.
Muchas veces pensamos que la santidad está muy lejos y que es inalcanzable. Sin embargo, es alcanzable para todos los cristianos con una vida virtuosa, viviendo de acuerdo con la voluntad de Dios. La santidad se adquiere con la fidelidad y rectitud de todos los días.
El paso del corazón del Roque nos invita a reflexionar también sobre el poder de la oración de intercesión. La fidelidad en el seguimiento del Señor va acompañada de grandes privilegios, porque Dios escucha la plegaria de los justos (1Pedro 3,12). Y este paso del corazón del Roque es una oportunidad para pidamos las bendiciones que cada uno necesite por la intercesión de San Roque González. En este sentido es fundamental y es una gran oportunidad que aprovechemos para visitar el corazón de Roque González y pidamos bendiciones para nuestras familias y comunidades en estos tiempos difíciles.
El sentido más claro de la obra de Dios a través de las reliquias es en la misma vida pública de Cristo, una mujer que desde hacía doce años estaba enferma con derrames de sangre, se curó instantáneamente al tocarle el borde de su túnica (Mateo 9,20-22). También vemos en las primeras comunidades cristianos que “Dios hacía grandes milagros por medio de Pablo, tanto que hasta los pañuelos o las ropas que habían sido tocadas por sus cuerpo eran llevados a los enfermos y éstos se curaban de sus enfermedades, y los espíritus malignos salían de ellos” (Hechos 19,11-12).
Ojalá que el paso del corazón de San Roque González y la devoción a los santos, sean caminos para seguir confiando cada vez más en un Dios que continua obrando en su pueblo de manera clara y visible. Que por la intercesión de San Roque González, el Señor bendiga nuestros pueblos y naciones en este camino hacia una auténtica vida cristiana, comprometida con el evangelio.
